Para mantener sana nuestra boca es necesario mantener hábitos de higiene correctos, es decir hábitos de cepillado y de uso de seda dental adecuados, de tal forma que podamos remover los restos de comida y bacterias que producen las enfermedades orales.
En relación a esto, tenemos que cepillarnos los dientes 3 veces al día, idealmente después de cada comida principal (desayuno – almuerzo – cena). Esto aplica para adultos y niños, de tal forma que puede realizarse como una actividad familiar y entretenida, sobre todo antes de dormir. Cabe destacar que no solo es importante la frecuencia con la que realizamos el cepillado, sino que también la técnica que es fundamental para que la remoción de los restos de alimentos sea efectiva. La técnica más comúnmente utilizada es la técnica horizontal, sin embargo ¡esta no funciona! ¿Lo sabías?
No olvides además, que siempre después de cepillar los dientes, tenemos que limpiar también nuestra lengua, pues actúa como una “alfombra” de tal forma que los restos de alimentos y bacterias quedan retenidos en su superficie, pudiendo generarse una lengua de color blanco y mal aliento. Para limpiar tu lengua puedes usar un “limpialengua” y sino el mismo cepillo solo con agua con movimientos desde atrás hacia adelante.
Si tienes dudas sobre tu técnica de cepillado o de cómo está tu lengua ¡no dudes en contactarnos!
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